TEATRO INDEPENDIENTE: Un sueño al servicio del arte

Rubén “Chuña” Iriarte 

 Ser feliz (o por lo menos intentarlo) es transitar por este mundo cumpliendo el precepto mas importante de todos, “vivir de lo que nos gusta”. Hay quienes buscan ese camino gastando su dinero en lujosos autos, importantes inmuebles y en complacer a bellas mujeres.

Otros, los menos, piensan en algo más grande. Materializar sus más anhelados sueños. Es el caso del director teatral e integrante del grupo “Nueva Escena”, Rubén “Chuña” Iriarte quien junto a colegas del medio logro fundar en nuestra ciudad el Teatro Independiente “El Pasillo”, ubicado en José de la Iglesia 1190.

Esta nueva propuesta pudo lograrse gracias a la iniciativa de un puñado de actores, entre ellos Juan Carlos Stopiñan (Nueva Escena),  que con gran tesón gestionaron durante tres años y medio el apoyo del Instituto Nacional de Teatro. A si mismo también se recibió la colaboración de la Secretaria de Cultura de la Provincia y la Municipalidad de San Salvador de Jujuy (en la persona del Arq. Raúl Jorge).

El 16 de Agosto de 2011 finalmente abrió sus puertas al público presentando “Casa de Piedra”, obra de Jorge Accame. Pieza teatral que se realizo en co-producción con los grupos Senda y Nueva Escena.

Desde allí y hasta el momento pasaron con éxito distintos artistas, producciones  y charlas temáticas de las provincias de Salta, Tucumán, Buenos Aires que colmaron las setenta (70) butacas que dispone el teatro.

El proyecto que aún continua en plena vigencia tiene la pretensión de parte de sus creadores de mejorar el espacio físico para una mejor comodidad. Por ello se trabaja en la construcción de un entrepiso para localizar el equipamiento técnico y a la vez aumentar la capacidad de butacas llegando a (100) cien.

Vivir del Teatro en Jujuy cuesta y mucho. A pesar de ello todavía quedan “militantes del arte” como el “Chuña” Iriarte que confiesa que tiene presente que posiblemente no se haga millonario vendiendo entradas. Pero esta convencido que su misión es lograr que las personas “piensen al teatro como un espacio constetatario  para crear, cuestionar y cambiar la realidad”

Si ese propósito es cumplido habremos caminado por ese angosto pasillo para llegar a un lugar donde estaremos mucho mejor que ahora.